Cuando queremos obtener imágenes para diagnóstico y/o tratamiento de diversas enfermedades, usualmente usamos como ayuda diagnóstica los rayos X, siendo que al referirnos a los rayos x estamos incluyendo en ellos a la placa simple, la fluoroscopía y la tomografía axial computarizada, ya que todos ellos usan el mismo tipo de energía radiante.
Durante el embarazo puede ser necesario usar cualquiera de ellos, siendo que ahí tenemos que conocer si el método que se va a escoger es seguro para el bebé que se está formando.
Una de las ayudas más importantes del los rayos X en ginecología es que en el caso de una paciente a la que se le haya colocado un dispositivo intrauterino (DIU) y esta acuda a nuestra consulta para un examen de control, y a la exploración manual notamos que los hilos de dicho dispositivos no sean palpables y tengamos la duda que este se haya movido o desplazado, en ese momento podemos solicitar un radiografía pélvica con la finalidad de observar la ubicación de dispositivo.
No existe un procedimiento diagnóstico único que produzca la suficiente radiación para amenazar el bienestar del embrión y el feto en desarrollo. O sea que si se tomó una placa sin saber que estaba gestando, eso de ninguna manera debería ser un motivo de angustia ni, mucho menos, de pensar en un aborto. En general para que un feto sea afectado se necesita una dosis mínima de 5 A 10 RADS, siendo que las placas usan muchísimo menos radiación, tanto así que se usa como medida las milésimas de rad. Entonces para graficar lo que hemos dicho, podemos poner como ejemplo una placa de tórax, que expone a la paciente a 0.06 rads ( 60 milirads), por lo que serían necesarias 166 de esas placas para que halla un riesgo real para el feto. O si hablamos de una placa de abdomen, que usa 290 milirads, necesitaríamos hacer más de 30 para que no halla riesgo.
Y con mayor razón las placas de dientes que a veces necesita nuestro odontólogo, ya que la radiación va enfocada al diente y llega en muy poca proporción al abdomen. O sea que es prácticamente imposible que un estudio radiográfico único cause daño a su bebé. De todas maneras, y por sentido común, es mejor evitar los rayos x durante el embarazo, especialmente en el primer trimestre. Si durante el embarazo se necesita un diagnóstico por imágenes, hay que darle preferencia a los métodos sabidamente inocuos, como la ecografía. O la resonancia magnética si ya pasó el primer trimestre. Y si de todas maneras necesita hacerse un examen de rayos x, y no hay manera de posponerlo para luego del parto, usualmente en todos los servicios de radiología tienen unos mandiles de plomo que puede ponerse y que protegerán al bebé de la radiación. Por eso es importante que le avise a la persona que va a tomar la placa que usted está embarazada o que podría estarlo, en caso de no tener seguridad.
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Todavía no puedo creer que no sé por dónde empezar, mi nombre es Juan, tengo 36 años, me diagnosticaron herpes genital, perdí toda esperanza en la vida, pero como cualquier otra, todavía busqué un curar incluso en Internet y ahí es donde conocí al Dr. Ogala. No podía creerlo al principio, pero también mi conmoción después de la administración de sus medicamentos a base de hierbas. Estoy tan feliz de decir que ahora estoy curado. Necesito compartir este milagro. experiencia, así que les digo a todos los demás con enfermedades de herpes genital, por favor, para una vida mejor y un mejor entorno, póngase en contacto con el Dr. Ogala por correo electrónico: ogalasolutiontemple@gmail.com, también puede llamar o WhatsApp +2348052394128
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